La aplicación de la pintura dependía de lo que el artista quería hacer y expresar. El trazo contínuo es lo más frecuente, pero también se realizaba la tinta plana, la aplicación de un color uniforme en la figura. El tamponado es otro recurso utilizado; consiste en realizar puntos consecutivos como relleno en las figuras animales, pero también aparecen de manera aislada en forma de líneas. En la cueva de El Castillo (Cantabria) aparece un ejemplo de esto último muy espectacular. A través de un largo pasadizo aparecen estos puntos alineados invitándonos a que continuemos hacia el interior de la cueva. También aparecen sin causa aparente.