A esta estructura la caracteriza que los miembros del grupo tienen absoluta libertad, es decir, puede hacer cada uno lo que desee, lo que conduce a la anarquía.
El líder orienta de manera sutil pero dejando al grupo en plena libertad; importan más las libertades individuales que la cohesión grupal; la integración de los miembros del grupo se da espontáneamente, sin interferencia del líder, reina la improvisación ya que en este tipo de estructuras no se formulan planes de trabajo, pues las acciones se ejecutan al albedrío de sus miembros.