Son aquellos con cuyos valores, ideas y creencias se identifica una persona, aunque no pertenezca necesariamente a ese grupo.
Para los trabajos de promoción social es importante tener en cuenta la existencia de estos grupos, porque al ser tomados como referentes del comportamiento y las actitudes de algunos miembros de las comunidades o grupos con los que se va a trabajar, pueden constituir trabas al desarrollo de la acción, de no ser conocidos o tenidos en cuenta, pues muchas veces estos grupos no hacen parte de la comunidad o son externos a ella.